quilombo en el mate...

y si, sigo con un mambo en la cabeza que a veces es difícil de explicar... como todos saben las cosas con el rubio no andan particularmente bien. es decir, superficialmente todo está bárbaro, salimos, vemos amigos, etc. pero no dejo de tener esta sensación desde que volvimos de argentina, esta sensación de mierda al saber que queremos cosas muy distintas en la vida, de pensar que todo el amor del mundo no basta para superar ciertas barreras. cuando yo lo conocí lo veía como el amor de mi vida, hasta empecé a pensar en casamiento, en hijos, en armar una flia... pero ha pasado tanta agua bajo el puente que ya no se si es eso lo que quiero, el es bueno y me ama, yo lo amo, pero no es suficiente. el quiere quedarse aquí, este es su país, aca tiene todo lo que conoce y no está interesado en otra cosa. yo, por mi lado, quiero conocer el mundo, quiero vivir en distintos lugares, aprender idiomas, hacer amigos...yo a mi país lo abandoné hace mucho y sólo quiero encontrar un lugar al que pueda sentir mi hogar...y lentamente me doy cuenta que ese lugar no es israel.
como si todo esto fuera poco, el rubio decidió unilateralmente que no sigue con la terapia de pareja y la verdad que yo ya estoy cansado de tantas vueltas... yo, el inmigrante, "inmaduro" (según él), soy el que trata de salvar esta relación mientras que él, más grande, con toda su vida arreglada me hace sentir que le importa un pito todo. yo no creo que la verdadera razón sea que yo no le importo (aunque varios amigos que nos conocen a los dos y la psicologa me tiraron la onda de que tal vez el no se anima a cortar la relación e inconcientemente se manda toas estas cosas que me lastiman mucho), yo creo que tiene demasiados mambos internos que todavía no resolvió y no quiere ayuda para resolverlos.
no puedo negar que estoy muy triste y confundido...para rematar, se acuerdan que en un post anterior les conté sobre una visita internacional que iba a tener? la tuve y no voy a dar demasiados detalles por respeto al rubio, al que adoro, pero me pasaron cosas, se me movió la estanteria...se avecinan tiempos de cambio, lo siento en el aire y, aunque en cierto lugar de mi ser siento que es el momento y que vendrán cosas buenas, también sé que no será fácil, que para llegar a donde quiero llegar y hacer lo que quiero hacer quedan muchas lágrimas por derramar.